Aunque la OPEP (Organización de Países Productores de Petróleo) está cumpliendo sorprendentemente el acuerdo alcanzado en diciembre pasado para reducir su producción y provocar así un incremento de los precios del crudo, la mayor actividad de la industria del «fracking» en Estados Unidos está neutralizando la posible subida del petróleo.
El «fracking» es una técnica que se utiliza para extraer el petróleo y el gas que se ha quedado impregnado en las rocas y que es difícil de obtener con métodos habituales. Para ello se inyecta en el subsuelo agua y otras sustancias químicas que expulsan a la superficie los hidrocarburos. Habitualmente, cuando se da por explotado un yacimiento con las técnicas tradicionales, en él queda entre un 55 y un 75% de crudo y gas, según ha explicado Nemesio Fernández-Cuesta, presidente de Isolux y gran experto en hidrocarburos tras ocupar importantes cargos durante muchos años en Repsol.
El pasado diciembre, los 13 países de la OPEP y otros 11 grandes productores decidieron retirar del mercado 1,8 millones de barriles diarios durante los seis primeros meses de 2017, en un acuerdo «histórico» que buscaba elevar unos precios presionados a la baja durante dos años por el exceso de oferta. Desde entonces, el petróleo se ha encarecido un 19,5%, al pasar de 46 dólares el barril a los actuales 55 dólares.
Sin embargo, la estrategia de la OPEP se ha vuelto en su contra, como ya reconocen en el seno de este cártel, porque al subir la cotización del crudo ha propiciado la reapertura de cientos de pozos de hidrocarburos en Norteamérica que estaban parados en 2016 por el descenso de los precios, que los hacía económicamente inviables. La OPEP estima que la producción de crudo en Estados Unidos crecerá un 1,74% durante 2017. En cualquier caso, en los últimos cinco años EE.UU. ha aumentado su producción en 4 millones de barriles/día y un 47% su producción de gas.
Fernández-Cuesta vaticinó en un reciente encuentro organizado por el IESE que los precios del petróleo se mantendrán este año «bajos y de forma estable entre los 55 y los 60 dólares el barril».
ABC