La inversión directa en el exterior (IDE) de China experimentó un fuerte crecimiento durante 2016, según anunció el Ministerio de Comercio.
La proyección señala que finalizará el año con alrededor de u$s 161.170 millones, lo que será su máximo nivel histórico luego del anterior récord registrado en 2015 con u$s 118.000 millones.
La inversión extranjera directa (IED), en tanto, permaneció estable. En la medición que excluye la inversión en el sector financiero, llegó a u$s 126.000 millones. En 2015, la IED había subido un 6,4% en comparación con la de 2014, hasta u$s 126.270 millones.
Entre enero y noviembre de 2016, la IED creció un 3,9% interanual, mientras que la IDE se incrementó un 55,3% interanual.
El Buró Nacional de Estadísticas, en tanto, publicó que la ganancia de las principales empresas industriales chinas ascendieron a u$s 111.480 millones en el mes de noviembre, con un aumento del 14,5% con respecto al mismo mes de 2015.
En el acumulado de los primeros 11 meses del año, los beneficios de las industrias estudiadas -aquellas con ingresos anuales superiores a u$s 2,8 millones- totalizaron u$s 867.000 millones, un ascenso del 9,4% frente al mismo periodo de 2015.
Según el experto en estadísticas del BNE He Ping, los principales factores para el pronunciado aumento de los beneficios fueron el crecimiento de la producción y las ventas, un alza significativa en los precios, y las positivas cifras en sectores como la electrónica o los derivados del petróleo.
En noviembre el índice de precios de producción, que mide el crecimiento de los costos en el sector industrial, aumentó un 3,3%, la mayor alza en cinco años.