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Marcelo Orrego: «Se aceleró la demanda de minerales críticos y tenemos que estar preparados»
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Martín Llaryora: «Tenemos que defender a la minería como lo hacemos con el agro y la industria automotriz»
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La Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM) celebró el Día de la Minería con una gala en Córdoba ante más de 380 invitados. Entre discursos y charlas por lo bajo, trascendieron algunas preocupaciones y se renovaron las expectativas para el sector. El distinguido evento, realizado en el salón Alto Botánico del noroeste de la capital provincial, sirvió de presentación oficial y pública del nuevo secretario de Minería de la Nación, Luis Lucero. «Vivimos un tiempo especialmente esperanzador y desafiante para nuestra actividad», dijo el nuevo funcionario, quien pidió a los empresarios «enfrentar los obstáculos e ir construyendo inteligentemente las soluciones» que permitirán que los nuevos proyectos entren en producción más temprano que tarde. «Unánimemente (los inversores) nos manifiestan su interés en las oportunidades que se presentan en este nuevo capítulo que se está escribiendo en nuestro país. Es nuestra opción no desaprovecharlas. Lo que está en juego es la calidad de vida de las generaciones que nos siguen y, antes, la oportunidad de crear empleo y sacar de la pobreza a muchos de nuestros hermanos argentinos sumergidos en condiciones de vida que nos interpelan a aquellos que hemos sido beneficiados por condiciones sociales y de educación», remarcó el secretario. Los gobernadores que también apoyan a la minería
El gobernador de Córdoba y anfitrión de la celebración, Martín Llaryora, pidió en su discurso «entender que la minería es parte de la Argentina» y aseveró que «la tenemos que defender como defendemos, en nuestro caso, el agro, a la industria del conocimiento, la automotriz, la industria del talento”.
Su par sanjuanino, Marcelo Orrego, abogó por la sanción de la ley bases y el RIGI para impulsar las grandes inversiones, particularmente, en el desarrollo del cobre y litio. “Hoy el mundo nos está dando una oportunidad. Estoy convencido de que lo que viene, la electromovilidad, y la transición energética ya no es lo futuro, prácticamente es el presente, y tiene una demanda de minerales, sobre todo la demanda de minerales críticos», expuso desde el escenario. Para impulsar al sector, Orrego también consideró necesario «mejorar la macro, tener una estabilidad fiscal y seguridad jurídica. Pero también recuperar el tipo de cambio y tener la posibilidad en el tiempo de poder eliminar el cepo».
En la gala estuviron presentes el embajador de Canadá, Reid Sirrs, y el recientemente nombrado embajado de Perú, Carlos Alberto Chocano Burga, entre otros invitados. También fueron parte el presidente de la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados, Walberto Allende; el ministro de Producción Ciencia e Innovación Tecnológica de Córdoba, Pedro de la Rosa; el ministro de Minería de Catamarca, Marcelo Murúa; la ministra de Minería y Medio Ambiente de Mendoza, Jimena Latorre, en representación del gobernador Alfredo Cornejo, que envió una carta amistosa para el sector; el nuevo titular del Segemar, Julio Novillo, y la ex secretaría de Minería, Flavia Royón.
El presidente de CAEM,Roberto Cacciola, remarcó que la minería es «uno de los principales motores del crecimiento» y subrayó que «si se dan determinadas condiciones», esta actividad «contribuirá significativamente a un despegue efectivo de la economía Argentina».
«Se ha avanzado muchísimo en la integración público privada fundamentalmente en las provincias mineras y a nivel nacional, hoy nos encontramos en pleno proceso de colaboración con las autoridades. El crecimiento genera muchos desafíos, capacitación, desarrollo de proveedores e infraestructura, entre otros. Pero por sobre todas las cosas un compromiso firme de todos para lograr que sea ordenado y equilibrado», destacó Cacciola.
El oro y la plata necesitan una solución
Al mismo tiempo, el directivo de Minera Santa Cruz, con casi cuatro décadas de experiencia en el sector, volvió a alertar por la situación del oro y la plata. «Representan el 70% de las exportaciones mineras en la actualidad y están presentes en la industria fotográfica, química, médica y electrónica. Tanto el oro como la plata son metales utilizados para la fabricación de celulares, elementos que nos acompañan permanentemente en la vida moderna, junto con otros metales tales como el aluminio, cobre, cobalto. Hoy la realidad es que la mayoría de los proyectos en operación son maduros, próximos a concluir su ciclo de vida. Es imprescindible estimular fuertemente la exploración tanto en los proyectos en producción como en aquellos que podrían derivar en nuevos yacimientos», advirtió.
Según estiman en CAEM, para paliar el decaimiento del oro y la plata se necesitarán triplicar los u$s426 millones destinados a exploración en 2023. Energy Report pudo saber que en los próximos días los empresarios llevarán un abanico de propuestas en este sentido al nuevo despacho de Lucero en el ministerio de Economía.
En cuanto al litio, Cacciola destacó que está en «pleno crecimiento» con tres proyectos en producción, seis en construcción y más de 20 en exploración. «Resulta fundamental por su contribución a la electromovilidad y la reducción de la huella de carbono», dijo. Y sobre el cobre apuntó que está «expectante» desde hace décadas, con la posibilidad de un gran aporte debido al alto nivel de inversión por la envergadura de los proyectos. «Se trata de un metal insustituible en la conectividad en todas sus formas y en la electromovilidad. Una gran herramienta, que podrá contribuir al inicio de la construcción de estos proyectos, será la esperada sanción del RIGI», dijo al avalar la sanción de la ley bases y el régimen para las grandes inversiones.
La paralización de la obra pública frenó la actividad de los minerales no metalíferos
El presidente de la cámara nacional también aprovechó para resaltar la importancia de la producción de los minerales no metalíferos y algunos metalíferos vinculados fundamentalmente con la construcción y la obra pública, denominados genéricamente como minerales industriales. «La provincia de Córdoba, junto con la de Buenos Aires, son líderes en la producción de estos minerales. Si bien no participan significativamente en la exportación nos permiten sustituir importaciones en el orden de 4.000 millones de dólares anuales», subrayó.
Sin embargo, los empresarios cordobeses no ocultaron su preocupación por la abrupta paralización de la obra pública a nivel nacional, que impacta de lleno en su actividad. Es más, en Córdoba, donde se produce casi el 25% de los áridos y el cemento del país, estimaron que la caída en la producción de minerales no metalíferos llega al 50%, cifra inédita y solo comparable con la pandemia. Y Cacciola tomó nota. «Debemos trabajar con inteligencia para buscar alternativas que permitan regularizar la demanda y revertir la profunda caída. Conversando con referentes de este sector, pertenecientes a Córdoba y Buenos Aires, hemos acordado trabajar fuertemente durante las próximas semanas para elaborar propuestas concretas», reveló el titular de CAEM.
Hernán Soneyro, gerente comercial de la firma Cantesur y directivo de la Cámara Empresaria Minera de Córdoba (Cemincor), reivindicó la minería en su provincia y recordó que en el mundo se producen 44 billones de áridos al año, pero que el nivel de consumo es muy desparejo y erfleja el atraso productivo. En países como Canadá y Estados Unidos se consume 12 toneladas por habitante por año, mientras que Europa son 6 toneladas y China 17. «Hoy Argentina no llega al 1,5 de toneladas por habitante. ¿Que significa esto? Que una mayor generación de áridos y una mayor calidad de vida a través de la infraestructura, mejora las herramientas para superar nuestros índices de pobreza«, respondió.
«Hoy el término obra pública esta vapuleado como algo de lo cual se puede prescindir», continuó el joven y prometedor empresario mediterráneo. «Nosotros entendemos minería como la obra que se ve en la puerta de tu casa, en tu barrio, tu ciudad. Entendemos la obra pública como construcción de viviendas, caminos, hospitales y escuelas. Entendemos la obra pública como vía de comunicación para que nuestros productos puedan ser exportados y también entendemos la obra pública como generación de fuentes de trabajo con obras que perduran en el tiempo», manifestó Soneyro.
En esa línea, Cacciola enfatizó que para construir las nuevas minas de litio y cobre se necesitan áridos, cemento, piedra y otros minerales que el suelo argentino provee. «Si avanzamos en el desarrollo minero, también mejoraremos la infraestructura y las condiciones de vida de nuestra gente», sostuvo. «No se trata solo de extraer recursos de la tierra, sino de construir un futuro en el que podamos prosperar, tengamos empleos dignos y nuestra economía crezca de manera sostenible», recalcó.
Para el presidente de CAEM, se trata de diversificar la economía y fomentar un crecimiento más estable y equilibrado. «La minería es un catalizador para el desarrollo regional. Así como resulta claro que el mundo quiere energías limpias, reducir el uso de combustibles fósiles, mejores comunicaciones y más tecnología, nosotros podemos responder a esa demanda produciendo esos metales, debemos atender otra demanda interna que nos pide producción minera no metalífera», expresó Cacciola.
«Igual que una semilla que germina y florece en un campo fértil, la minería puede revitalizar áreas marginadas, creando empleo, mejorando la infraestructura que es para la gente, los argentinos, en todas partes de nuestro país», concluyó.
Un evento carbono neutral
La celebración se caracterizó además por ser carbono neutral. Genneia, compañía líder en generación de energías renovables en el país, neutralizó la huella de carbono del evento con Certificado de Reducción de Emisiones (CER) provenientes de sus centros de generación de energía limpia con el objetivo de reducir el impacto ambiental. El cálculo de la huella de carbono fue realizado por la consultora especializada ProSustentia.
El encuentro contó con el auspicio de Los Azules, Minera Aguilar, Grupo Petersen, DSI Underground, Max Capital, CAPMIN, Minera Santa Cruz, Albemarle, Alcalis de la Patagonia, Accenture, Arcadium Lithium, Josemaría, M3, Pan American Silver, Dorado Exploraciones & Servicios, BBVA, Banco Comafi, Río Tinto Rincón Litio, Mansfield Minera, Abrasilver, Cargas del Plata, First Quantum, Eramet, Exar, Mara, Fortescue, Glencore Pachón y la Cámara de la Piedra de la provincia de Buenos Aires. También con el acompañamiento institucional de UIA, Camarco, Arminera, Genneia y Panorama Minero.
Por qué el Día de la Minería se celebra el 7 de mayo
El Día de la Minería se celebra el 7 de mayo en conmemoración a la primera Ley de Fomento Minero sancionada por la Asamblea Constituyente el 7 de mayo de 1813, a propuesta de la Junta de Gobierno, que estableció el primer marco normativo para la minería y marcó un hito en la historia de la economía argentina.
Posteriormente, en 1886 y mediante la Ley N° 1919, se creó el Código Nacional de Minería que rige los derechos, obligaciones y procedimientos referentes a la adquisición, explotación y aprovechamiento de las sustancias minerales. Pero no hasta el 20 de diciembre de 1945, que se establació el 7 de mayo como el «Día Nacional de la Minería», según el Decreto 33.338.
Como explicó al inicio de la celebración la directora ejecutiva de CAEM, Alejandra Cardona, en 1813 se impulsó la minería para tener la primera moneda acuñada, con el Sol de Mayo en una de sus caras y la leyenda “en unión y libertad” en la otra. «Así, las Provincias del Rio de la Plata, comenzaban a sentar los cimientos de lo que hoy conocemos como Argentina», dijo.
Cardona también aprovechó la apertura del encuentro para recordar el orginen de la palabra Argentina. «Allá por el Siglo XVI, uno de los primeros exploradores que pisaron estas tierras la llamó Terra Argentea. Hay un mapa de la época con este nombre. Decía que era por la abundancia de metales. La Terra Argentea devino en la Tierra del Plata, luego… del Rio de la Plata, y se llamó así hasta casi mediados del siglo XIX», describió al repasar el nombre del país.
«La minería está inscrita en nuestro pasado, en eso que nos nombra y da identidad. Pero la minería es también nuestro presente, sobre el que edificamos nuestro desarrollo y soñamos nuestro futuro», remarcó.
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