Esta semana se conocerá la “foto” del sector fabril y de la construcción, pero un informe de la Secretaría de Industria aseguró que ya antes de las PASO hubo un retroceso de 1% mensual y de 2,1% interanual. Massa anunció que habilitará compras al exterior por USD 700 millones y la UIA espera los detalles
Esta semana el Indec dará a conocer la última “foto” de dos sectores clave de la economía, como la industria y la construcción, antes de las PASO y el coletazo de ese resultado, que fue la decisión del Gobierno de devaluar el tipo de cambio oficial, lo que impactó en la inflación. Algunas estimaciones privadas, pero también oficiales, intentaron anticipar qué podría mostrar ese número.
“En función del crecimiento de indicadores líderes de la industria como la producción automotriz y la refinación de petróleo, que reflejaron subas del 4% y 2% mensual, respectivamente, estimamos que la industria marque una leve recuperación en julio, después de la caída del 1,3% registrada el mes anterior. Con todo, en la comparación anual todavía reflejará una contracción del 1,7 por ciento. Para el caso de la construcción, tanto los despachos de cemento como el índice Construya reflejaron contracciones de 7% y 2% mensual, respectivamente. Con esto como base esperamos que la actividad exhiba una caída en torno al 1,5% en el mes, y del 2,7% anual”, apuntó un informe de la consultora LCG.
Por su lado, la consultora Orlando J. Ferreres midió que la industria manufacturera en julio tuvo la caída más notoria entre los sectores más representativos de la economía y que se contrajo así 4,1% en julio, y en los primeros siete meses del año lleva un saldo apenas positivo: 0,1 por ciento.
A propósito de la actividad fabril, un informe reciente de la Fundación FIEL midió que en julio hubo una caída interanual de 2,5%, por lo que acumularían así tres meses consecutivos en retroceso. Durante julio, midió ese centro de estudios, el mejor desempeño entre los sectores industriales volvió a ser la industria automotriz.
En términos generales, el informe aseguró que “los indicadores que permiten monitorear la actual fase de contracción no arrojan señales de una rápida reversión”, por lo que la tendencia podría incluso profundizarse tras el salto devaluatorio, el impacto en precios y las restricciones adicionales a las importaciones que ese movimiento podría provocar en los próximos meses.
“Todos ellos son consistentes con el tránsito por una fase de caída de la producción industrial, que se extiende por los últimos catorce meses y que resulta poco profunda en la comparación con episodios previos. En agosto, en la previa a las elecciones PASO se habían reforzado las restricciones al acceso a las divisas ‐a partir de la reducción del indicador de Capacidad Económica Financiera (CEF) o la dilación en la aprobación de SIRA‐, sumando mayores trabas al desarrollo de la actividad productiva”, dijo FIEL al respecto.
Un informe del Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), que depende de la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo consideró, por su parte, que su índice anticipado de actividad industrial, que está basado en el consumo de energía eléctrica por parte de las industrias sobre la base de datos de Cammesa, “estima una contracción interanual de 2,1% para julio, mientras que la actividad respecto a junio descendería un 1%, indicó.
Todavía por arriba
Así, “para el acumulado enero-julio, no obstante, se espera que la actividad industrial se ubique 0,8% por encima del mismo período de 2022, lo cual implicaría continuar con el mayor nivel acumulado promedio de actividad industrial desde al menos 2016 (inicio de la serie)”, puntualizaron.
Analizado por sectores, según datos de Cammesa recogidos por el CEP XXI, en julio el consumo eléctrico del sector de refinación de petróleo cayó 0,9% interanual y 2,9% intermensual. Caucho y plástico, por su parte, creció 2,6% intermensual y 4,2% interanual; Materiales para la Construcción se desplomó 14,2% interanual y 3,6% intermensual; maquinaria y equipo subió 1,5% interanual y 7,6% intermensual; en Químicos la expansión del consumo de energía del sector fue de 0,5%, tanto interanual como intermensual.
Massa anunció que descomprimirá parte de las urgencias de pago de importaciones de las pymes industriales para abastecerse desde el exterior de bienes e insumos que necesitan para mantener en funcionamiento sus líneas de producción. La medida alcanzaría operaciones por unos USD 700 millones.
Así lo expresó por redes sociales el ministro y candidato presidencial oficialista, que ya había anticipado que el Poder Ejecutivo exploraba esa posibilidad el viernes, durante su participación en Paraná del Día de la Industria que organizó la Unión Industrial Argentina (UIA).
“Tomamos la decisión de liberar, para todas las pymes industriales de la Argentina, todas las SIRAs que estaban pendientes para garantizar el empleo de nuestras pymes y seguir exportando trabajo argentino al mundo”, expresó el funcionario.
A partir de esta medida, informaron desde el Palacio de Hacienda, 7.428 pymes “recibirán aprobación de sus SIRAs por un monto de 700 millones de dólares. Las mismas se componen de 475 millones de dólares de bienes intermedios (insumos y bienes para la producción); 175 millones de dólares de piezas y accesorios (repuestos); y 68 millones de dólares de bienes de consumo”, ampliaron.